La pronunciación de los políticos en el tema del canon digital me está pareciendo bochornosa. El oportunismo pepero, que con la rapidez del rayo ha convertido un error de una senadora (cobran una pasta y no saben ni de lo que debaten) en el pilar fundamental de su campaña,( ¡ menuda mierda de programa electoral debe llevar el PP -si es que lleva alguno- para tener que dar bombo y platillo a su oposición al canon que ellos mismos impusieron), esconde en cambio un trasfondo fascistoide pues si habéis sabido leer entre líneas, lo que realmente quiere el PP es la supresión de la copia privada y la censura de Internet, es decir acabar con la libertad de expresión en la Red, ya que con la otra ya acabaron hace tiempo comprando los medios de comunicación.
Me niego, en cambio, a pensar que el futuro gobierno de España pueda estar condicionado al pronunciamiento de los partidos sobre el canon digital, ¿o sí?.
Hace mucho tiempo me preguntaron por el futuro de la óptica oftálmica y les respondí si habían visto a alguien en Star Trek usar gafas.
Y es que cuando pensamos en el futuro nos creemos que es pasado mañana, y no.
Sin menospreciar el asunto del canon digital, que no es baladí, pienso que hay muchas más cosas en juego y que también son de suma importancia para el futuro de nuestra sociedad.
El afán privatizador de este PP, sus intentos continuos para evitar la igualdad , que es un derecho fundamental, de todos los españoles y españolas, su caspa ecuménica, sus mentiras goebbelianas, son avales suficientes para no desear volver a ver a los paranoicos señores de la guerra en la Moncloa y no soy el único.
Veo el futuro y, aunque no me vaya a decenas de siglos venideros, prefiero pensar en mis hijos que en mi mismo y creo que la apuesta socialista a medio/largo plazo es suficiente motivo para otorgarles mi voto: el estado del bienestar está en juego.
El Gobierno del PSOE debe rectificar en el asunto del canon. Y debe hacerlo porque, sin ser el asunto más importante del mundo, casi dos millones de ciudadanos y ciudadanas nos hemos manifestado públicamente en contra y no está bien darle la espalda a la ciudadanía y aunque no se puede comparar ni de lejos con el pronunciamiento ciudadano contra la guerra de Irak, darle la espalda al votante sin ni siquiera oir lo que tiene que decir es algo muy, pero que muy chungo.
Bajo esta premisa no es el canon digital en sí lo que puede restar o dar votos el próximo marzo, si no el pasarse por el forro el clamor popular. Aunque también es verdad que agarrarse a un clavo ardiendo y aprovechar un resbalón del contrario y erigirse en abanderados del No al Canon cual Marianico Alcázar y Pedrín, pensando en que van a conseguir un voto más, es volver, por enésima vez a subestimar la inteligencia de la cuidadanía y seguir haciendo el ridículo.
Me preocupa más que mucho voto progresista se quede en casa como consecuencia, más que del apoyo a la SGAE por parte del PSOE, por su alejamiento de la ciudadanía y porque algunos parecen hablar por la voz de su amo, para justificar lo injustificable.
Así pues estoy seguro de que mi voto irá para el PSOE, tan seguro como que intentaré por todos los medios a mi alcance a que se enteren de cómo es la mafia a la que ahora están apoyando, pero eso en otros posts.
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